El Parlamento Europeo ha aprobado en comisión una enmienda que pretende vigilar fuertemente las transferencias a los monederos autogestionados (no custodiados). Aunque todavía faltan algunos pasos para la adopción definitiva de la medida, es un paso más hacia el endurecimiento de las condiciones de existencia de las empresas de criptomonedas. Echamos un vistazo a los riesgos, y a los próximos pasos a seguir.
El Parlamento Europeo avanza hacia una fuerte supervisión de los monederos autónomos
Como recordatorio, los monederos autoalojados son aquellos que no dependen de una entidad centralizada para mantener las criptodivisas. Esta categoría incluye los monederos de hardware, como los que ofrece Ledger, así como todos aquellos en los que el usuario tiene su propia clave privada.
Estos monederos están lógicamente poco controlados, a diferencia de un monedero ofrecido por una plataforma de intercambio. Esto no es del agrado de algunos legisladores europeos, que quieren echar un vistazo a las criptomonedas que pasan por estos medios.
A principios de esta semana, le contamos que la Comisión ECON tenía previsto votar una enmienda sobre este tema. Incluía dos fuertes medidas:
- La recopilación de información sobre las transferencias de criptomoneda por parte de los servicios regulados, independientemente del importe
- Supervisión de los monederos autoalojados, con plataformas reguladas obligadas a recoger información sobre la naturaleza de las transferencias y los titulares de los fondos
Al contrario de lo que hemos leído por aquí y por allá, no se trata de una prohibición de los monederos autogestionados, sino que de hecho complicaría enormemente el trabajo de las empresas. Por supuesto, esto plantea cuestiones de viabilidad: ¿cómo se pueden controlar estas transacciones a gran escala? Y, sobre todo, ¿por qué la UE se concede a sí misma el derecho de vigilar tan estrechamente los monederos digitales, cuando no lo hace con otro tipo de transacciones?
Se planea la vigilancia de las criptodivisas
La votación fue validada ayer en comisión, por lo que es un primer paso para una mayor supervisión. Como sabemos, las criptomonedas ya son generalmente rastreables, con transacciones registradas en registros a menudo públicos. Por lo tanto, este tipo de medida supondría un freno considerable a la fluidez de las transferencias y plantea importantes problemas logísticos.
La esperanza para el ecosistema es que esta votación no sea en absoluto definitiva. La enmienda debe ser examinada y debatida por varios organismos de la UE. La propuesta se pondrá de nuevo sobre la mesa a mediados de abril, con un debate que incluirá al Parlamento Europeo, la Comisión Europea y el Consejo de Europa.
Se espera que esta fase dure unas semanas y permita introducir cambios en la propuesta. Así que todavía no hay nada escrito, pero la votación mostró la voluntad de avanzar en la dirección de la supervisión:
2/ Very thin margins.
Compromise D: 58 yes | 52 no | 7 abstentions
Compromise E: 62|51|5It seems like a majority of (most) MEPs from S&D, GUE, Greens & Renew voted in favor, while a minority of (most) MEPs from EPP & ID voted against. ECR seems more split (tbd).
— Patrick Hansen (@paddi_hansen) March 31, 2022
Así que todo dependerá de las próximas semanas y de si habrá algún cambio en este proyecto
El ecosistema de las criptomonedas en peligro
Como ya se ha mencionado, esta propuesta no sólo plantea problemas éticos. Si se valida, sería un obstáculo tan grande para las plataformas de intercambio que las más pequeñas podrían decidir dejar de permitir las transferencias a los monederos autoalojados. Para otros, como Binance o Coinbase, aumentaría drásticamente los costes de procesamiento:
3/ As this is completely unfeasible, we expect that companies like Coinbase would only allow transfers to unhosted wallets linked to their own customers and verified through a private key signing (which makes these transfers more complicated and costly).
— Unstoppable Finance (@UnstoppableDeFi) March 31, 2022
También significa que la información de identificación, como los nombres de los titulares de criptodivisas, las direcciones u otros datos sensibles, estaría vinculada a las direcciones de sus carteras y a todas sus transacciones en la cadena de bloques.
El sector de las criptomonedas se está movilizando para plantear su preocupación al respecto. La medida no sólo es contraria a los ideales que defiende el ecosistema, sino que podría tener consecuencias considerables para su desarrollo a largo plazo. Por lo tanto, seguiremos de cerca la evolución y las próximas fechas clave que nos permitirán conocer mejor el futuro de las criptodivisas en Europa.